La Agenda 2030 es un plan de control político, económico y social al que se han adherido los países miembros de la ONU y organizaciones de todo tipo. Su fin último es instaurar el Nuevo Orden Mundial, estableciendo un gobierno global supranacional, controlado por una élite, en el que la libertad, la seguridad y los derechos de las personas estarán supeditados a las necesidades y caprichos de los que ostenten el poder.

La Agenda 2030 fue adoptada en la Asamblea General de la ONU en septiembre de 2015, bajo la resolución “Transformar nuestro mundo: la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible”. Es un plan progresivo de 15 años en el que poder deconstruir todas las estructuras políticas, económicas y sociales actuales y transformarlas en un arma de control y sometimiento de las personas en todo el mundo, y en especial, en occidente.

¿Cuáles son los objetivos de la Agenda 2030?

La Agenda 2030 plantea 17 objetivos y 169 metas que afectan al ámbito económico, social, político y ambiental. Con ellos pretenden subvertir el orden social de occidente basado en la cultura grecolatina y en el cristianismo, para promover una nueva ética globalista anticristiana y antinatural, y conformar una nueva estructura geopolítica en la que las naciones y sus derechos quedan diluidos en un ente global que puede utilizar sus recursos naturales, energéticos y humanos a su antojo.

Estos objetivos, que son “de alcance mundial y aplicación universal”, son presentados con una estética engañosa en la que se utiliza un lenguaje cromático (colores vivos), simbólico (iconos sencillos con significados positivos) y léxico (uso de palabras como paz, vida, salud, educación, etc.). Todo ello para para lograr un consenso común y una adhesión general a sus principios y para enmascarar el objetivo último, que es tener el control total de la vida y recursos del planeta Tierra y someter sus habitantes bajo una esclavitud material y una colonización ideológica.

Los fines pueden parecen muy inocentes, pero los medios no lo son:

  • Hablan de igualdad para referirse a la ideología de género.
  • Hablan de salud reproductiva para referirse a la anticoncepción y al aborto.
  • Hablan de educación de calidad para referirse al adoctrinamiento.
  • Hablan de innovación para referirse a transhumanismo.
  • Hablan de alianzas nacionales para referirse a un gobierno mundial.
  • Hablan de alimentación para promover las granjas de insectos.

¿Qué esconde la Agenda 2030?

La Agenda 2030 esconde un plan siniestro para alterar nuestra forma de vida y someterla al dictado y control de una élite globalista.

Detrás de la falsa promesa de alcanzar el “fin de la pobreza”, la “salud y el bienestar” universal o la “educación de calidad”, se esconden realidades oscuras, como la reducción de la población, la promoción del aborto o el adoctrinamiento de los niños.

Es por tanto un engaño para cautivar a personas que desean vivir en un mundo mejor, sin ser conscientes de que el precio para conseguirlo es su libertad, su propiedad y su identidad. El lema “no tendrás nada y serás feliz” es un mantra que se va haciendo realidad a medida que renunciamos a nuestra forma de vivir y a nuestros valores a cambio de unos objetivos utópicos, irreales e inalcanzables, impuestos por personas que llevan una vida contraria e incoherente con estos mismos objetivos.

La Agenda 2030 también esconde un mercadeo de dinero, privilegios, influencias y poder entre gobiernos, empresas multinacionales, medios de comunicación y organismos globalistas, ahogados en corrupción e inmoralidad.

¿Cuáles son los antecedentes de la Agenda 2030?

La Agenda 2030, también conocida como los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) no es algo nuevo, sino que es un refrito de décadas de distintas conferencias y documentos de la Naciones Unidas. Se nutre de los objetivos propuestos en las conferencias de Dacca (1964), Bucarest (1974), la Cumbre de la Tierra en Río de Janeiro (1992), El Cairo (1994), Pekin (1995), Kioto (1997), Buenos Aires (1998), la Cumbre del Milenio en Nueva York (2000), Copenhague (2009), Río+20 (2012), París (2015), etc.

Como antecedentes documentales podemos destacar la Carta Mundial de la Naturaleza de 1982, el Informe Brundland de 1987, El Programa 21 de Río (1992) y sobre todo Carta de la Tierra y Los Objetivos del Milenio,ambos del año 2000.

En la Carta de la Tierra, Mikhail Gorbachev, uno de sus promotores, dice que es «el manifiesto de una nueva ética para el nuevo mundo», un verdadero «Decálogo de la Nueva Era», base para un código de conducta universal que deberá regir al mundo desde el año 2000. «Estos nuevos conceptos -dijo el ex premier soviético y antiguo jefe de la KGB-, se deberán aplicar a todo el sistema de ideas, a la moral y a la ética y constituirán un nuevo modo de vida. El mecanismo que usaremos, será el reemplazo de los Diez Mandamientos, por los principios contenidos en esta Carta o Constitución de la Tierra«, (cfr. S. Arguedas, La Cumbre de la Tierra, AICA-DOC 2106, Buenos Aires, 30-04-97).

Queda claro entonces cuál es el objetivo de estos planes. En dichos documentos se incide una y otra vez en conseguir el control de la natalidad, alterar el concepto de familia, impulsar la ideología de género, el aborto, la eutanasia y defender un ecologismo radical que presenta al ser humano como un parásito que debe ser contenido y eliminado.

Este nuevo código de conducta será como una nueva religión mundial, sincretista y gnóstica que busque la implantación del paraíso en la tierra y combata la libertad de pensamiento y conciencia.

Tendrá un lenguaje propio, pretendidamente ambiguo, que estará lleno de conceptos que se repetirán una y otra vez hasta que queden grabados en la mente de las personas: empoderamiento de la mujer, resiliencia, inclusividad, sostenibilidad, salud sexual y reproductiva, Madre Tierra, cogobernanza, derechos sexuales de los niños, multiculturalidad, etc.

Sus dogmas sobre el cambio climático y la ideología de género serán de obligado cumplimento y se instaurarán de forma transversal en todos los gobiernos y legislaciones del mundo, perdiendo su soberanía, sus recursos y su identidad y sacrificando su economía, su industria, sus riquezas naturales y su estabilidad social. Aquellos que no se plieguen serán perseguidos, castigados y señalados como “negacionistas”.

¿Cómo la implantarán en la sociedad?

Se utilizarán diversos mecanismos psicológicos y recursos de comuniación.

Jugarán con la ingenuidad de aquellos crédulos que piensen en las bondades de la ONU y del resto organismos y empresas para construir un mundo mejor, en paz y armonía con la naturaleza. Estas personas aceptarán una vida de pobreza material y energética, sacrificando su bienestar social en nombre de un ideal falso, que nunca llegará.

Cuando la apelación a la ingenuidad no surja el efecto deseado, entonces entrará en juego el miedo. Miedo a un enemigo invisible que amenaza la vida, la seguridad y la supervivencia de las personas en la Tierra. Ese enemigo cambiará de nombre según el interés de cada momento: unas veces se llamará cambio climático, otras recesión económica, en otras será una amenaza de guerra mundialun ataque extraterrestre, los peligros de la inteligencia artificial o una pandemia descontrolada.

Ese miedo llevará a las personas a regalar su libertad, a denunciar y perseguir a los que no cooperen con el plan y a obedecer irracionalmente cualquier norma por muy absurda que sea. Esto ya lo hemos vivido y lo volveremos a vivir de forma diferente con la siguiente crisis mundial que provoquen.

Esta persecución social será auspiciada desde los gobiernos y sus estructuras afines (ministerios, comisiones, institutos, observatorios,…) debidamente subvencionadas. Contará con el servilismo de los medios de comunicación y la cooperación de empresas, organizaciones e instituciones que difundirán la Agenda 2030 a cambio de contratos y subvenciones. Obligarán a los trabajadores a formarse en igualdad de género, a asumir cuotas y a cumplir con obligaciones absurdas en nombre de la sostenibilidad.

Para que el cambio sea irreversible, la Agenda 2030 se impondrá desde los colegios de forma transversal en todas las asignaturas, para configurar las mentes de los niños de forma que no distingan entre conocimiento e ideología, entre verdad y relato, entre hechos y opiniones, entre realidad y conciencia, para hacerles dependientes emocionalmente y confundirles sobre su propia identidad y sexualidad.

También serán cómplices las instituciones religiosas, que renunciarán a sus principios y creencias para adaptarse a los nuevos tiempos, arrastrando con fe ciega a sus feligreses hacia los planteamientos globalistas y adheriéndose a la nueva religión climática.

Cuando dicen:

FIN DE LA POBREZA

En realidad quieren decir:

REDUCCIÓN DE LA POBLACIÓN

¿POR QUÉ ES ESTO?

Al contrario de lo que nos hacen creer, la pobreza en el mundo no es un problema económico; si lo fuera, tendría muy fácil solución: crear un fondo común entre todos los países, multinacionales y filántropos y destinarlo a los lugares donde hay necesidad. Pero no es así.

Tampoco es un problema de escasez de recursos: cada día vemos cómo se tiran miles de toneladas de alimentos y otros bienes; y también vemos cómo países muy ricos en recursos, mantienen a sus habitantes en estados de pobreza inaceptables. No va por ahí la cosa.

Dirán que es un problema de superpoblación: nos dicen que el «pobre planeta» no puede producir alimentos para tantas personas. Esta es una de las causas que según Intermón Oxfam provoca la pobreza en el mundo.

Siguiendo su lógica habría dos formas fundamentales de terminar con la pobreza: o aumentar los recursos o reducir la población¿CUÁL CREES TÚ QUE PRIORIZARÁN?

¿Cómo lo harán?

1. Promoviendo leyes que favorezcan el aborto y la anticoncepción.
2. Promoviendo leyes que promuevan la eutanasia.
3. Promoviendo situaciones sociales de desesperanza que favorezcan el suicidio, especialmente entre jóvenes y ancianos.
4. Introduciendo en la alimentación sustancias nocivas para la salud.
5. Promoviendo estilos de vida que favorezcan la aparición de cánceres.
6. Promoviendo una patologización de la vida (tratar como una enfermedad cualquier situación desafavorable en la vida) que fomente el consumo abusivo de fármacos.
7. Promoviendo guerras limitadas; sí, como la de Ucrania.
8. Promoviendo epidemias organizadas; sí, como la del Covid19.
9. Promoviendo crisis económicas que lleven a la pobreza y a la desesperación a las personas.

Además, para justificarlo hablarán de cambio climático, sostenibilidad, salud reproductiva, igualdad, seguridad, longevidad, etc. ¿No te lo crees? Mira el resto de objetivos de la Agenda 2030.

Cuando dicen:

HAMBRE CERO

En realidad quieren decir:

MONOPOLIO DE LOS ALIMENTOS

¿POR QUÉ ES ESTO?

Este objetivo que puede parece muy loable, encierra una trampa: la solución para que no haya hambre es que la producción de alimentos a nivel mundial esté concentrada en muy pocas manos (las suyas) y así ellos podrán producir, controlar y distribuir los alimentos, según los criterios que favorezcan sus planes.

Dirán que hay que desarrollar un cambio profundo en el sistema agroalimentario mundial para favorecer la productividad agrícola y la producción alimentaria sostenible. Y la solución será que ese nuevo sistema esté gestionado por ellos, mediante legislaciones cada vez más estrictas que desincentiven y arruinen las iniciativas agrícolas particulares, y acaparando ellos cada vez más terrenos agrícolas.

En última instancia controlarán qué tipo y qué cantidad de alimentos puede consumir cada persona, según supuestos criterios de salud y sostenibilidad, pudiendo premiar o castigar las conductas que contravengan el orden establecido.

¿Cómo lo harán?

– Promoviendo la escasez y el encarecimiento de las materias primas
– Promoviendo leyes que desincentiven el cultivo y la ganadería
– Promoviendo el aumento de los precios de los transportes
– Adquiriendo grandes extensiones de terreno que ya no son rentables a sus legítimos dueños.
– Estableciendo planes de alimentación a nivel mundial en base a criterios e intereses espurios.

Cuando dicen:

SALUD Y BIENESTAR

En realidad quieren decir:

ABORTO Y ANTICONCEPCIÓN

¿POR QUÉ ES ESTO?

Salud y bienestar son dos palabras muy atractivas, pero que en este caso esconden una realidad muy oscura.

Una de las formas más efectivas de frenar el crecimiento de la población es implantar leyes que promuevan el aborto como un derecho en todo el mundo, con el resultado de millones de niños matados en el vientre de sus madres cada año.

Otra de las medidas es fomentar una cultura de la anticoncepción en la que tener hijos esté mal visto y se considere un mal que hay que evitar a toda costa, como siempre por motivos ecológicos y argumentos de sostenibilidad.

Todo esto lo esconderán convenientemente con el eufemismo de «garantizar el acceso universal a los servicios de salud sexual y reproductiva de las mujeres».

¿Cómo lo harán?

– Declararán por ley que el aborto es un derecho
– Castigarán cualquier iniciativa que busque salvar la vida de esos niños.
– Penalizarán cualquier ayuda alternativa que se ofrezca a las madres embarazadas.
– Promoverán el aborto especialmente entre menores de edad, sin el conocimiento de sus padres.
– Obligarán a los países a aprobar leyes a favor del aborto y la anticoncepción para obtener a cambio ayudas y recursos para mejorar otras áreas de la salud o luchar contra enfermedades como la malaria o la tuberculosis.
– Desincentivarán el tener hijos, quitando ayudas y derechos a las familias numerosas.
– Generarán un ambiente social beligerante contra la maternidad, especialmente contra aquellos que tengan más de un hijo.

Cuando dicen:

EDUCACIÓN DE CALIDAD

En realidad quieren decir:

ADOCTRINAMIENTO EN LA EDUCACIÓN

¿POR QUÉ ES ESTO?

Para consolidar la transformación social que quieren implantar es fundamental que las nuevas generaciones, especialmente los niños, tengan asumidos e interiorizados los conceptos clave que fundamentan el nuevo orden de las cosas.

Conceptos como ideología de género, cambio climático o laicismo son introducidos de forma transversal en todas las materias para transformar la manera de pensar de los más jóvenes, incluso en contra de los criterios y las creencias de sus padres.

Esta manipulación de las mentes de los niños se realiza fundamentalmente en los colegios, pero también a través de los contenidos culturales, como libros, películas, series de televisión, juguetes, etc.

Para poder controlar mejor el proceso obligarán a los centros escolares a introducir estas ideologías en sus temarios, bajo la amenaza de quitar subvenciones, imponiendo multas o incluso con el cierre de los colegios que no se adhieran. Igualmente, perseguirán y proscribirán a los profesores que no se plieguen a estos mandatos.

Además, esto estará combinado con una relajación en las exigencias curriculares y con una devaluación de la autoridad del profesor, fomentando alumnos poco acostumbrados al esfuerzo y con pocos conocimientos en materias clave como la historia o la filosofía, lo que los hace menos capaces de pensar por sí mismos y más permeables a las ideas con las que los quieren adoctrinar.

¿Cómo lo harán?

– Imponiendo estas ideas de forma transversal en los temarios de todas las asignaturas para normalizarlas y que sean más fácilmente asumibles.
– Haciendo hincapié especialmente en cambiar la enseñanza de la historia y la literatura, como formas de modificar el pensamiento de los estudiantes.
– Aprobando leyes que persigan a los centros y a los trabajadores (directores, profesores, etc.) que no sigan las consignas.
– Sancionando y denunciando a centros y profesionales que ofrezcan resistencia.
– Promoviendo la enseñanza pública, que es la que mejor pueden controlar, y asfixiando poco a poco cualquier iniciativa de enseñanza privada o concertada.
– Estableciendo normas de convivencia contrarias al orden natural, fomentando talleres y charlas sobre género, asignaturas de sexualidad en niños, etc.
– Dificultando que los padres ejerzan su derecho constitucional a decidir la educación que quieren para sus hijos.
– Promoviendo y subvencionando contenidos culturales que introduzcan y extiendan las ideologías dominantes en libros y contenidos audiovisuales.
– Promoviendo planes de estudio y leyes educativas cada vez más laxas en las que se priorizan las experiencias a los conocimientos, no se valora el esfuerzo y se eliminan las pruebas de evaluación objetivas.

Cuando dicen:

IGUALDAD DE GÉNERO

En realidad quieren decir:

TRANSEXUALIDAD Y PEDERASTIA

¿POR QUÉ ES ESTO?

La ideología de género es una perversión de la naturaleza humana que ya está implementada y asumida en muchos ámbitos de la sociedad y lejos de detenerse en cada una de sus victorias legislativas y sociales, sigue como una apisonadora conquistando nuevas metas a cada cual más perversa.

Su objetivo último es sustituir artificialmente el concepto de familia natural, base del orden, el crecimiento y la estabilidad en el desarrollo de las sociedades desde el inicio de la historia humana, por una amalgama de teorías, conceptos y experimentos sociales que buscan una disociación del individuo de su naturaleza física, social y espiritual para poder manipularlo más fácilmente.

Entre sus víctimas primordiales están los niños, como ya hemos visto en el punto sobre el Adoctrinamiento en la educación, y uno de los objetivos más urgentes es el de promover la normalización de la transexualidad entre los niños.

Adoctrinar a los niños desde pequeños con la mentira de que pueden estar atrapados en el cuerpo equivocado altera la experiencia que el niño tiene de la realidad. Si no pueden confiar en la realidad de sus cuerpos físicos, ¿en quién o en qué pueden confiar? La ideología transgénero en los colegios es un abuso psicológico que a menudo lleva a la castración química, la esterilización y la mutilación quirúrgica.

Otro de los objetivos que no tardaremos en ver es la normalización de las relaciones sexuales entre adultos y niños, es decir de la pederastia, bajo el sofisma del consentimiento.

¿Cómo lo harán?

– Creando leyes que obliguen a normalizar los comportamientos transgénero en los colegios.
– Multando y persiguiendo a las personas que promuevan alternativas asistenciales a las personas que sufren de disforia de género.
– Introduciendo en los colegios materiales, charlas, actividades que promuevan la transexualidad e introduzcan elementos de confusión en los niños.
– Organizando eventos municipales y sociales destinados a niños y a familias dirigidos por adultos travestidos o mutilados.
– Introduciendo en el debate público, a modo de ventana de overton, los supuestos «derechos sexuales de los niños» y el uso pernicioso del término consentimiento aplicado a las relaciones con adultos.
– Promoviendo el adelanto de la edad de iniciación sexual entre los menores de edad.

Cuando dicen:

AGUA LIMPIA Y SANEAMIENTO

En realidad quieren decir:

PRIVATIZACIÓN DEL AGUA

¿POR QUÉ ES ESTO?

El agua es el elemento más fundamental para la vida y está vinculado directamente con la salud de las personas.

Poder controlar y gestionar este recurso tan importante es una estrategia imprescindible para conseguir muchos de los objetivos planteados en la Agenda 2030.

Dirán que su gestión sostenible y eficiente es la garantía para que todas las personas del mundo puedan disfrutar de este bien natural, pero de nuevo, esto solo será posible si son ellos los que llevan a cabo esta gestión y distribución y de paso, se enriquecen con ello.

¿Cómo lo harán?

– Creando una sensación de escasez de agua, a veces de forma artificial, como consecuencia del cambio climático o de la superpoblación.
– Promoviendo legislaciones que modifiquen las reservas de agua de los países para acrecentar esta escasez de agua.
– Promoviendo la gestión privada de los recursos acuíferos.
– Promoviendo la construcción y uso de desaladoras que tienen un gran impacto medioambiental.
– Promoviendo el consumo de agua regenerada.

Cuando dicen:

ENERGÍA ASEQUIBLE Y NO CONTAMINANTE

En realidad quieren decir:

POBREZA ENERGÉTICA

¿POR QUÉ ES ESTO?

La energía es uno de los factores más importantes en el desarrollo industrial de un país y también una de las industrias que más dinero generan y por eso siempre son multinacionales las que la controlan.

Actualmente, la mayoría de infraestructuras energéticas son de dominio y gestión nacional, lo que supone un obstáculo para aquellos que quieren enriquecerse de ellas y controlarlas a gran escala.

Por esta razón, muy pronto oiremos cada vez más voces reclamando un nuevo sistema energético que «sustituya las viejas y obsoletas infraestructuras» por un sistema energético transnacional, bajo el pretexto de la eficiencia, la sostenibilidad y el «deseo de llevar la energía a todos los rincones del mundo».

En los últimos años, la locura climática ha llevado a promover las llamadas «energías limpias» que no están suficientemente desarrolladas para sustituir a las energías tradicionales, provocando un aumento desorbitado de precios, cortes en los suministros, contaminación paisajística y que muchas personas no puedan acceder a esas fuentes de energía, por no poder costearlas.

Esta llamada «transición ecológica» es una amenaza para el progreso y el bienestar de muchos países, ya que al mismo tiempo se destruyen las fuentes de energía alternativas, como centrales térmicas o nucleares.

Una de las industrias que han llevado al extremo estas políticas son las automovilísticas, empujadas por legislaciones irracionales que esperan eliminar de la circulación a todos los vehículos de combustión en 2035. Como consecuencia, la afluencia de coches eléctricos con autonomía reducida y precios desorbitados, amenaza con dejar sin medio de transporte autónomo a gran parte de la sociedad en poco tiempo.

El aumento de precios en energías como la electricidad, el gas o los combustibles fósiles afectan directamente a las economías familiares y a los pequeños negocios que no pueden asumir el aumento de costes y se ven abocados al cierre.

El aumento del coste de la vida, provocado por una inflación provocada en muchas ocasiones, es un factor de empobrecimiento social, haciendo a los ciudadanos cada vez más dependientes de los subsidios de los estados.

¿Cómo lo harán?

– Promoverán legislaciones que prohíban y graven las energías tradicionales, aun cuando no haya alternativas equivalentes.
– Sustituirán las infraestructuras energéticas nacionales por un modelo centralizado transnacional, que concentre la gestión en pocas manos.
– Penalizarán a los consumidores que no puedan permitirse «energías limpias», limitando su movilidad y aplicándoles sanciones y cargos extraordinarios.
– Prohibirán progresivamente la circulación de vehículos privados, endureciendo cada vez más los requisitos e imponiendo medidas que dificulten y encarezcan la adquisición de estos vehículos.
– Impondrán impuestos abusivos en el consumo de energía, enriqueciéndose a costa de servicios básicos, como la electricidad, el agua o el gas.
– Promoverán las bondades de la pobreza energética en medios de comunicación, como solución al problema climático y como consecuencia de la sobrepoblación, generando un ambiente de crispación contra los que no se adhieran a estos principios.

Cuando dicen:

TRABAJO DECENTE Y CRECIMIENTO ECONÓMICO

En realidad quieren decir:

EXPLOTACIÓN LABORAL Y ESCLAVITUD FISCAL

¿POR QUÉ ES ESTO?

El trabajo digno es uno de los derechos fundamentales del ser humano, pero eso no lo protege de ser utilizado por los poderosos como un medio de explotación y esclavitud.

Aquí no nos referimos únicamente a jornadas laborales interminables, salarios miserables, trabajo infantil, condiciones insalubres, etc. como se sufren en la mayoría de países pobres.

En este caso hablamos más bien de cómo los gobiernos y las empresas globalistas buscan asfixiar cualquier iniciativa privada que les pueda quitar cuota de mercado o que permita a los individuos tener cierta independencia laboral.

La transformación laboral que vivimos se manifiesta principalmente en dos frentes:

– El monopolio digital: que consiste en la imposibilidad de competir en igualdad de condiciones con empresas multinacionales que han colonizado los mercados, llevándolos a un monopolio digital. Pensemos aquí en librerías, tiendas de ropa, artículos para el hogar, productos de alimentación, etc. que tienen que cerrar sus tiendas físicas o adaptarlas a un modelo digital en el que dependen totalmente (fabricación, fijación de precios, logística, promoción, transporte, servicio postventa) de las normas y exigencias, en ocasiones caprichosas, de un mercado privado, dominado por una multinacional. Un modelo en el que al final unos pocos se benefician y la gran mayoría acaban perdiendo.

– Abuso fiscal: Por otra parte, los gobiernos penalizan cada vez más las iniciativas laborales privadas, mediante una imposición fiscal abusiva, cuyo único fin es desincentivar el trabajo autónomo que no dependa ni del estado, ni de las empresas globalistas. Este empobrecimiento generado a través de impuestos, que no van precisamente a mejorar la sanidad y la educación, sirve para consolidar un modelo de dependencia del Estado, que a través de subsidios, chiringuitos ideológicos y oposiciones públicas cada vez menos exigentes, encadenan la vida social y laboral del ciudadano a los objetivos y necesidades del gobierno.

Al mismo tiempo vemos cómo crecen las iniciativas dirigidas a fomentar una menor presencialidad laboral, con el pretexto de favorecer la flexibilidad, la conciliación, ahorrar energía y reducir la contaminación. Sin embargo, a largo plazo muchos de estos cambios supondrán para muchas personas vivir más aisladas, separándoles de una de sus principales redes de socialización y por lo tanto ser más vulnerables; un aumento del cansancio, el estrés, la ansiedad y la depresión, aumento de los riesgos laborales y en definitiva un mayor riesgo para su salud.

¿Cómo lo harán?

– Aprobando leyes que reduzcan la autonomía laboral de los individuos y penalicen el trabajo autónomo, con impuestos y burocracia.
– Promoviendo por acción u omisión la globalización de los mercados, gestionados por unas pocas empresas.
– Promoviendo el teletrabajo, la jornada laboral de 4 días y otras medidas que reduzcan la presencialidad laboral.

Cuando dicen:

INDUSTRIA, INNOVACIÓN E INFRAESTRUCTURA

En realidad quieren decir:

4ª REVOLUCIÓN INDUSTRIAL. TRANSHUMANISMO

¿POR QUÉ ES ESTO?

La 4ª revolución industrial ya está aquí y no lo digo yo, lo predica Klaus Schwab, el presidente del Foro Económico Mundial, en su libro con el mismo título.

Consiste, de nuevo, en lo mismo: cambiar todos los sistemas industriales, económicos y sociales actuales por un nuevo paradigma basado en «tecnologías inteligentes» físicas, digitales y biológicas y que (a estas alturas a nadie sorprenderá) son controladas por ellos.

Estas tecnologías estarán basadas en la ingeniería genética, las neurotecnologías, la llamada inteligencia artificial, la nanotecnología, los robots, la biotecnología y las nuevas tecnologías de comunicación, combinadas y conectadas para controlar la vida de las personas.

Este nuevo modelo cambiará por completo, y en muy poco tiempo, la forma en que vivimos, trabajamos y nos relacionamos, generando un auténtico Nuevo Orden Mundial, que afectará a las legislaciones, los marcos éticos, y la seguridad a nivel planetario.

Uno de los campos en los que más impacto tendrán será en el mercado laboral, ya que se busca la automatización de todos los procesos productivos, sustituyendo cualquier tipo de mano de obra humana. Se estima que 5 millones de personas perderían su empleo en los 15 países más industrializados del mundo.¿Cuántos serán en países cuya economía se base en el sector primario o secundario?

Estos cambios serán tan rápidos y novedosos que solo se beneficiarán aquellos que tengan el dinero y los conocimientos para adaptarse al nuevo paradigma, el resto (la gran mayoría) quedarán a expensas de éstos.

Supondrá una sacudida al tablero de juego de la geopolítica y la seguridad mundial, ya que aquellos países que no se suban a este tren se quedarán fuera de juego. Y el billete para subirse será la aprobación de leyes ideológicas y la venta de las soberanías nacionales.

Pero esto no acaba aquí, porque toda esta revolución tecnológica no solo va a afectar a los modelos productivos, sino que se va a intentar alterar la propia naturaleza del ser humano.

Consideran que el ser humano es un producto defectuoso porque es fruto de una evolución ciega y quieren forzar una nueva evolución sirviéndose de la tecnología. De la mano de las ideas de Darwin, Nietzsche o Hegel pretenden crear un hombre nuevo, eugenésicamente perfecto, que supere la naturaleza biológica y sus limitaciones, como el dolor y la muerte.

Detrás de estas promesas de vida eterna lo que hay es un nuevo mercado en el que tener más salud, menos dolor o aumentar los años de vida se comprarán al peso, como en la carnicería y solo estarán accesibles para los pocos que se lo puedan permitir. Y también un control absoluto sobre la vida de las personas, su salud, su economía, sus desplazamientos, sus relaciones sociales y sus ideas, porque todo estará digitalizado y toda esa información será controlada y analizada por los mismos.

En definitiva, una mezcla de ideología, intereses económicos y poder, bajo un marxismo tecnocrático que promete la felicidad universal, que desprecia la dignidad humana, que ensalza la praxis como único criterio de verdad, que desprecia la ética como un obstáculo al progreso, que persigue la religión como un mito del pasado y que impone el totalitarismo para conseguir la paz mundial.

«No tendrás nada y serás feliz».

¿Cómo lo harán?

– Promoviendo legislaciones que levanten cualquier medida proteccionista o arancelaria de los Estados.
– Creando una cultura favorable a estos cambios a través de películas, series y libros futuristas en los que se pinta un futuro próspero gracias a la tecnología.
– Difundiendo regularmente falsas promesas de prolongación de la vida humana, curación de enfermedades y el fin de las desigualdades.
– Planteando la falsa dicotomía entre privacidad y seguridad, que genera una infravaloración de los derechos propios y de la intimidad personal en pos de un presunto bien mayor, en base a una amenaza inexistente.
– Creando un clima favorable hacia estas nuevas tecnologías, camufladas como avances tecnológicos que aparentemente nos faciliten la vida, como los sistemas populares de inteligencia artificial que permiten «hacer los deberes» o «hacen nuestro trabajo, sin que se entere el jefe». Cuando se entere el jefe verá que ya no eres necesario para hacer el trabajo.
– Prometiendo la vida eterna con implantes y medicina tecnológica, al mismo tiempo que se promueve una visión de la ética como el obstáculo que nos impide alcanzar la perfección humana.
– Digitalizando todos los aspectos de nuestra vida: nuestra identidad, nuestra salud, nuestro dinero, etc. para que sean más fácilmente controlables.

Cuando dicen:

REDUCCIÓN DE LAS DESIGUALDADES

En realidad quieren decir:

LEYES ÚNICAS PARA TODOS LOS PAÍSES. PENSAMIENTO ÚNICO

¿POR QUÉ ES ESTO?

Si has leído más de un objetivo te habrás dado cuenta de que hay un elemento que impide a los poderosos llevar a cabo sus planes con la facilidad con la que desearían: este elemento son las fronteras y la soberanía de los países.

Cada país tiene derecho sobre sus recursos, ya sean económicos, industriales o medioambientales y esto es una barrera de protección frente a los que quieren tener el control unificado de estos recursos. Esas diferencias entre los países son las «desigualdades» que hay que reducir.

Por eso todas las soluciones a los aparentes problemas que hay en el mundo se podrían resolver con medidas transnacionales que superen las barreras entre países y que les permitan tener campo abierto al desarrollo de sus planes. De lo contrario es más costoso y más lento tener que lidiar con los obstáculos legislativos, políticos y económicos de cada país.

El globalismo, para triunfar, necesita que todo el poder esté centralizado, que las leyes sean las mismas en todo el mundo, que todos tengan la misma cultura, los mismos valores, y sobre todo, reducir al mínimo la disidencia.

Para ello a nivel social, como hemos visto, es fundamental establecer un conjunto de «valores» globales y una ideología común que sea inyectada en la mente de las personas a través de la educación y del entretenimiento.

A nivel político, la tarea se realiza a través de influir en la elaboración de legislaciones que les sean favorables, ya sea a nivel nacional o, más fácilmente a nivel de organismos supranacionales, como la Unión Europea, la ONU, la OMS, el FMI, que tratan de imponer de forma centralizada las normas que deben adoptar coercitivamente todos los estados miembros.

¿Cómo lo harán?

– Influirán en los gobiernos de los países para aprobar leyes que levanten las restricciones y permitan unificar las normas y los criterios con el resto de países.
– Fomentarán la creación de más organismos supranacionales, que no son votados por los ciudadanos, para facilitar la imposición de estas legislaciones.
– Venderán poco a poco los recursos nacionales a empresas multinacionales que se sirvan de estas legislaciones para gestionar los recursos de forma global.
– Difundirán las supuestas ventajas de estas políticas a los ciudadanos, a través de los medios de información y comunicación para lograr un clima de opinión favorable y reducir las resistencias.
– Influirán en los gobiernos de los países para ir aprobando progresivamente leyes ideológicas contrarias a la dignidad del hombre.
– De nuevo, utilizarán la educación y los medios de información y entretenimiento para cimentar estas ideas en la población general. Por estos mismos medios generarán odio y rechazo hacia los que no se adhieran a estos planteamientos ideológicos.

Cuando dicen:

CIUDADES Y COMUNIDADES SOSTENIBLES

En realidad quieren decir:

VIGILANCIA Y CONTROL ABSOLUTO. TOTALITARISMO

¿POR QUÉ ES ESTO?

Más de la mitad de la población mundial vive en ciudades y esta cifra se incrementará todavía más en los próximos años.

Las personas tienden a vivir cada vez más concentradas en grandes núcleos urbanos, muchas veces empujados por la falta de oportunidades laborales o de servicios en las poblaciones periféricas.

Este fenómeno migratorio es el caldo de cultivo perfecto para establecer un nuevo concepto de ciudad, que llamarán «sostenible» y que se caracteriza por el control exhaustivo de los ciudadanos por parte de las autoridades, aliadas con las grandes empresas tecnológicas y constructoras, bajo la fórmula de colaboración público-privada o diálogo competitivo, siempre bajo la omnipresente amenaza del cambio climático.

En estas ciudades modernas, que ya se empiezan a vislumbrar todo estará controlado: los desplazamientos, el consumo de recursos, las compras, la alimentación, los hábitos de salud, las relaciones sociales, etc. Crearán las llamadas ciudades de 15 minutos, en las que tendrás todo cerca de casa y tendrás que justificar y pagar por desplazarte más allá de tu zona, controlando cuánto tiempo estás y qué recorrido realizas, gracias a los llamados filtros de tráfico.

Estas medidas que se promoverán «en tiempo de paz» para facilitar la comodidad ciudadana y reducir la contaminación, se volverán más estrictas en un contexto de emergencia, como guerras, desastres naturales, protestas sociales o apocalipsis climáticos.

Probablemente el indicador clave será la huella de carbono de cada ciudadano. Primero, para concienciar, parecerá casi un juego en el que cada ciudadano podrá calcular cuál es su huella de carbono. Posteriormente ese indicador será el requisito que tengamos que cumplir a la hora de adquirir ciertos bienes o tener derecho a utilizar servicios.

Podrán saber en todo momento dónde estamos, con quién estamos, qué hemos comprado, cómo hemos viajado, de qué hemos hablado, qué hemos comido, cuánto gastamos en ocio, cuanto tiempo tardamos en ducharnos, cuánta basura generamos y qué porcentaje reciclamos, qué esperanza de vida tenemos, cuánta carne consumimos o cuántos minutos utilizamos el coche.

En función de nuestros hábitos se crearán perfiles y se nos premiará o castigará en función de lo «sostenibles» que seamos, limitando nuestro acceso a bienes y servicios públicos y privados.

Esto será posible gracias a la tecnología, llenando nuestros hogares de dispositivos «inteligentes», que medirán y recogerán información de todo lo que hagamos; llenando las calles de cámaras, sensores y puntos de identificación digital, que indiquen qué estamos haciendo en cada momento; y exigiendo nuestros datos biométricos para hacer uso de cualquier servicio.

Este control absoluto de nuestras vidas por parte de los gobiernos es una nueva forma de totalitarismo, que se impondrá primero a nivel nacional, para establecerse finalmente a nivel mundial.

¿Te parece ciencia ficción? Aquí tienes un documento con varias de estas medidas, publicado por la consultora británica Arup Group, la Universidad de Leeds y el Grupo de Liderazgo Climático C40, una alianza de un centenar de ciudades, junto a la Open Society de George Soros, la Fundación Clinton y muchas otras organizaciones filantrópicas.

¿Cómo lo harán?

– Promoviendo políticas que incentiven la concentración de la población en las ciudades, que son más fáciles de controlar que los pueblos.
– Creando nuevos «derechos» sociales que podrán ser disfrutados en función del criterio supremo de la sostenibilidad.
– Utilizando la tecnología para medir, analizar y controlar todo lo que hacemos: cámaras de vigilancia, sensores, puntos de identificación biométrica, aplicaciones móviles, dispositivos «inteligentes», etc.
– Imponiendo el uso de la geolocalización y la identificación digital para todo tipo de acciones cotidianas, como usar el transporte público, comprar en supermercados o tirar la basura.
– Imponiendo el criterio medioambiental para poder acceder a todo tipo de bienes y servicios públicos y privados.
– Dividiendo y jerarquizando a los ciudadanos en función de sus hábitos de vida sostenibles.
– Creando un clima de linchamiento, cancelación y aislamiento social hacia las personas que tengan comportamientos poco sostenibles.

Cuando dicen:

PRODUCCIÓN Y CONSUMO RESPONSABLES

En realidad quieren decir:

ALIMENTOS TRANSGÉNICOS. GRANJAS DE INSECTOS

¿POR QUÉ ES ESTO?

La alimentación es uno de los pilares fundamentales de la salud humana. Poder controlar lo que comen la mayoría de seres humanos y tener un acceso tan directo a su salud es una tentación y un peligro muy grande.

Hemos visto en el Objetivo 2 que quieren tener el monopolio de la alimentación humana, pero no se van a quedar ahí.

Para ello es fundamental reducir el número de granjas e instalaciones agrícolas, quitando subvenciones, imponiendo criterios medioambientales y sostenibles que no sean económicamente rentables para agricultores y ganaderos.

Una vez conseguido esto, primero controlarán la mayoría de tierras agrícolas y ganaderas. El siguiente paso será establecer cultivos de productos modificados genéticamente, con el pretexto de que serán resistentes a las sequías, a las plagas y al cambio climático.

Promoverán la alimentación a base de insectos, argumentando que somos demasiado exquisitos y que en muchas partes del mundo se comen desde hace siglos e incluso son considerados como manjares.

En una etapa posterior, la producción de alimentos será completamente artificial, para fomentar una alimentación «libre de maltrato animal». De esta forma se producirán sustancias parecidas en cuanto a textura, color y sabor a la leche, los huevos, la carne o el pescado, e incluso utilizarán ese mismo nombre. «Alimentos» artificiales y desagradables, que sin duda tendrán un impacto negativo en la salud de millones de personas.

Sirviéndose del miedo y del peligro que supone el omnipresente cambio climático, junto a una crisis alimentaria que provocarán artificialmente, este plan será la única solución para la supervivencia de la humanidad en un planeta superpoblado.

Para la gente corriente, comer alimentos procedentes de animales será un crimen social y medioambiental; un lujo reservado únicamente para ricos y poderosos.

Dentro de lo que consideran «producción y consumo responsables» entrará también el consumo de agua reciclada, las restricciones y los cortes de suministro de energía (electricidad, gas,…), las prohibiciones al uso del vehículo privado, las restricciones a viajar en avión, al turismo, etc.

¿Cómo es posible que las personas acepten todo esto? Nos lo desvelan en la meta 12.8, a través de una campaña masiva de propaganda en medios de comunicación que prepare las mentes ciudadanas para vivir en pobreza: «De aquí a 2030, asegurar que las personas de todo el mundo tengan la información y los conocimientos pertinentes para el desarrollo sostenible y los estilos de vida en armonía con la naturaleza«.

¿Cómo lo harán?

– Comprando o expropiando terrenos de ganadería y agricultura para dedicarlos a poner placas solares y molinos de viento.
– Promoviendo legislaciones cada vez más estrictas, que aumenten los costes productivos agrícolas, desincentiven las profesiones agrícolas y obliguen a cerrar un gran número de granjas.
– Concentrando las tierras cultivables cada vez en menos manos.
– Generando artificialmente una escasez de alimentos que suponga una amenaza a medio plazo si no se toman medidas urgentes.
– Proponiendo como solución la generación de cultivos eficientes gestionados por robots e inteligencia artificial.
– Introduciendo y normalizando el consumo de insectos entre la población. Primero en forma de harinas y complementos y posteriormente como producto terminados, con la ayuda de los medios de información, que comunicarán las bondades de esta alimentación.

Cuando dicen:

ACCIÓN POR EL CLIMA

En realidad quieren decir:

GEOINGENIERÍA CLIMÁTICA

¿POR QUÉ ES ESTO?

La geoingeniería climática es la manipulación tecnológica deliberada de los sistemas naturales para influir en las condiciones climáticas y naturales del planeta, con la excusa de combatir el cambio climático.

Según Ecologistas en Acción, «la geoingeniería incluye tecnologías tan descabelladas como la cobertura de grandes extensiones de desiertos con plásticos reflectantes; megaplantaciones de cultivos transgénicos con hojas reflectantes; almacenamiento de CO2 comprimido en minas abandonadas y pozos petroleros; inyección de aerosoles de sulfatos (u otros materiales, como el óxido de aluminio) en la estratosfera para bloquear la luz del sol y blanqueamiento de las nubes para reflejarla; desvío de corrientes oceánicas; fertilización de los océanos con nanopartículas de hierro para incrementar el fitoplancton y, así, capturar CO2; enterrar enormes cantidades de carbón vegetal (biochar) para eliminar CO2; etc.»

Todas estas ideas y ocurrencias esconden un interés real por controlar los elementos meteorológicos y el desarrollo natural del planeta, pudiendo modificar, por ejemplo, en qué zonas llueve y dónde hay sequía, alterando la temperatura del planeta, las corrientes marinas, qué sustratos hay en la tierra, la calidad y cantidad de los cultivos, alterando los ecosistemas, destruyendo el equilibrio natural entre especies, afectando a la calidad del aire y muchísimas otras consecuencias imprevisibles e incalculables.

Para que un plan así pudiera tener éxito sería necesaria una colaboración permanente entre todos los países de mundo, algo que solo podría realizarse, de nuevo, mediante organismos supranacionales que gestionen o controlen sin obstáculos legales los medios necesarios para implementar estas tecnologías.

Pero si, como ya hemos explicado en otros puntos, no tienen reparos para jugar a ser Dios, modificando genéticamente las plantas, los animales e incluso al ser humano, tampoco los tendrán para intentar controlar o destruir Su creación.

Si algo de esto funcionara, su efecto no tendría por qué ser la detención del cambio climático, sino que podrían incluso acelerarlo o utilizarlo como arma contra países o regiones concretas, que no se plieguen a sus intereses. Si no funcionara podrían poner a todo el planeta en una situación de peligro absoluto o podrían perjudicar gravemente la vida de las personas y ecosistemas sobre los que realicen las pruebas. Su peligrosidad sería equivalente a las armas químicas, las armas biológicas o las pruebas nucleares.

¿Cómo lo harán?

– Probando y experimentando en zonas pobres los efectos de estas tecnologías.
– Permitiendo que empresas privadas puedan hacer estos experimentos y aprovecharlos para enriquecerse.
– Creando alianzas supranacionales para tomar decisiones que afecten a todos los habitantes del planeta.
– Exagerando los efectos del cambio climático y creando un ambiente mediático preapocalíptico para obtener una aprobación social de estos experimentos.

Cuando dicen:

VIDA SUBMARINA

En realidad quieren decir:

CONTROL ABSOLUTO DE LOS ALIMENTOS MARINOS

¿POR QUÉ ES ESTO?

Los océanos son una de las fuentes de recursos más grandes y potencialmente más ricas que tenemos en el planeta. Sus recursos conocidos y su industria potencial actual es equivalente al 5% anual del PIB mundial y sin embargo se sabe que hay muchísimos más recursos que todavía no se han explorado, con un valor incalculable.

Además, es una fuente de trabajo y alimento para casi la mitad de la población mundial. Lo que implica que es un recurso estratégico fundamental en el plan de dominación mundial.

Poder controlar y explotar estos recursos de forma exclusiva y limitar su gestión bajo la excusa de su protección y salvaguarda, significa poner en unas pocas manos un poder muy grande. Manos que ya han demostrado en infinidad de veces que se mueven por codicia y no por el bien común.

Hablamos de actividades industriales con gran impacto económico y medioambiental, como la acuicultura, minería marina, transporte de mercancías, producción de energía o ciudades que se han levantado sobre el océano. Todo ello bajo la conveniente etiqueta de «economía azul».

Aunque pueda parecer que lo que pase en los océanos no nos afecte directamente, la verdad es que su explotación impactará en nuestro futuro, tendrá un efecto en nuestra comida, en la energía, en la biodiversidad y en las extinciones de las especies.

¿Cómo lo harán?

– Quitando subvenciones a la pesca e imponiendo severas restricciones medioambientales para desincentivar las iniciativas particulares, igual que con la agricultura, y echar del mercado o adquirir a los pequeños productores marinos.
– Promoviendo la «gobernanza internacional» de los recursos marinos, cambiando la legislación sobre la gestión de las aguas internacionales.
– Sensibilizando a la población con campañas mediáticas y contenidos audiovisuales que favorezcan «la protección de los océanos» a cambio de monopolizar su gestión y explotación.

Cuando dicen:

VIDA DE ECOSISTEMAS TERRESTRES

En realidad quieren decir:

CONTROL ABSOLUTO DE LOS RECURSOS NATURALES

¿POR QUÉ ES ESTO?

Los recursos naturales terrestres tienen un valor incalculable, especialmente para proveer de alimento y salud a las personas. Solo los bosques son fuente de sustento para casi una de cada cinco personas que habitan en la Tierra. Ya hemos hablado del papel fundamental de la agricultura en la alimentación mundial, por lo que nos podemos hacer una idea clara de la importancia de que la gestión de estos recursos esté en buenas manos y la dependencia que puede crear si no lo están.

Estos motivos suponen un reto estratégico en el plan de gobernanza ambiental a nivel mundial que nos quieren imponer. Bajo la excusa de conservar y utilizar de forma sostenible la diversidad biológica y los ecosistemas, se arrogarán el derecho y la responsabilidad de gestionar estos recursos de forma global y limitar su uso y disfrute a solo unos pocos.

Uno de los sectores que más lo acusarán será el del turismo. Si venimos de unas décadas en las que asistimos a la «democratización» del turismo, con viajes low-cost a casi cualquier lugar del planeta y opciones asequibles de movilidad y disfrute vacacional para todos, ahora veremos el efecto contrario, con restricciones al uso del avión, tasas por visitar y pernoctar en las ciudades, subida de precios en todos los servicios, limitaciones de aforos y una premisa general de devolver el lujo de poder viajar a los más ricos, que podrán seguir utilizando sus aviones privados sin mayores dificultades, a pesar de la «catastrófica crisis climática».

¿Cómo lo harán?

– Suscribirán pactos públicos-privados en organismos supranacionales para promover la gobernanza ambiental global y arrogarse el derecho de usar y limitar el disfrute de los recursos naturales.
– Establecerán cuotas máximas de visitantes anuales, limitarán el número de camas de hotel disponibles, pondrán restricciones a las opciones de turismo económico como el alquiler vacacional de pisos de particulares, establecerán «tasas verdes» para turistas, limitarán el acceso a ciertos atractivos turísticos, etc.
– Al haber una menor oferta turística subirán los precios de todos los servicios para establecer barreras de entrada económicas más altas y expulsar a los visitantes de menores recursos económicos, bajo el pretexto de ofrecer «un turismo de calidad y menos masificado».
– Restringirán por ley los vuelos nacionales, obligando a desplazarse en tren y limitarán por oferta y precio las opciones de vuelos internacionales, reduciendo el número de operadores y gestionándolos ellos.

Cuando dicen:

PAZ, JUSTICIA E INSTITUCIONES SÓLIDAS

En realidad quieren decir:

ESTADOS POLICIALES. FIN DE LA LIBERTAD. POLÍTICA DEL MIEDO

¿POR QUÉ ES ESTO?

El miedo es el arma más poderosa y efectiva para poder controlar un colectivo. El miedo paraliza, bloquea la mente y hace serviles a los individuos, que aceptarán u obedecerán las normas que imponga la autoridad, sin cuestionarlas.

Por lo tanto, en su afán de dominar el mundo y subvertir el orden social actual, los poderosos no dudarán en provocar o aprovecharse de situaciones extraordinarias, en la que se produzca un clima de temor entre las personas para ir poco a poco quitándoles la libertad sin que se den cuenta.

Esto que puede sonarnos a China y su estricto control social, lo hemos vivido todos (muchos sin ser conscientes de ello) durante los años de pandemia. Veamos cuáles son los elementos principales:

  • Una amenaza externa: puede ser real, creada o provocada. Algunos ejemplos pueden ser catástrofes naturales, epidemias, guerras, crisis económicas, un golpe de estado, una oleada de robos en el barrio, una invasión alienígena… En definitiva, situaciones que alteran el orden normal de la cosas, que rompen con la rutina y someten a las personas a altas dosis de estrés, incertidumbre y miedo.
  • Una aparente solución: en medio de la confusión y del temor aparece alguien que parece que sabe lo que hace y que tiene una solución para devolvernos a la normalidad y seguridad de nuestras vidas anteriores.
  • Una contraprestación: pero como nada es gratis en esta vida, a cambio de la solución se nos pide que ofrezcamos una contraprestación. Ésta, rara vez será económica sino que se nos pedirá renunciar temporalmente a parte de nuestra privacidad, de nuestra libertad, de nuestra propiedad, para obtener una seguridad o protección de la que ahora carecemos y que estimaremos más valiosa que cualquier otra cosa.
  • La aceptación: Una vez aceptada la propuesta por la mayoría llenarán nuestra vida de normas que restrinjan nuestras libertades siempre bajo la promesa de la temporalidad y para ser más eficaces llenarán nuestras vidas de dispositivos que les permitan detectar la amenaza incluso antes de que se produzca.
  • El tiempo: cuando esa promesa de temporalidad comience a desvanecerse y la situación se alargue más de lo previsto, se producirán dos situaciones. Por una parte, muchas personas se habrán acostumbrado a esa privación de libertad y la habrán asumido como parte de la «nueva normalidad» que el contexto impone. Por otro lado habrá quienes empiecen a desconfiar e incluso a oponerse a las medidas, valorando más su libertad que la aparente protección que le ofrecen las nuevas normas.
  • Los cómplices: para evitar disidencias y detectar opositores hasta en los lugares más ocultos, los que ejercen el poder se servirán de aquellos que tengan más miedo, ofreciéndoles una oportunidad de demostrar su compromiso a la causa. Estos policías improvisados denunciarán a cualquier persona que infrinja las normas, movidos muchas veces por el odio y el pánico, deshumanizando a los infractores y tratándolos como una amenaza que hay que eliminar.
  • La represión: perseguir y castigar las infracciones permite consolidar la nueva situación en el tiempo, con el fin de establecer de forma permanente las nuevas medidas, que irán además siendo cada vez más estrictas. Cuanto más tiempo pasa, más se cede, más difícil es la posibilidad de recuperar la libertad y más totalitarismo.
  • La solución definitiva: este totalitarismo será el remedio final que, una vez establecido, ante la imposibilidad de volver al orden anterior, permanecerá de forma indefinida, cuando ya nadie ni siquiera se acuerde de la amenaza primera que provocó todo el cambio.

Este proceso se repite en mayor o menor medida muchas veces en nuestras vidas, no solo en situaciones de una gravedad excepcional, sino incluso como técnica comercial o requisito imprescindible para poder utilizar un servicio, para vendernos seguros, para instalarnos una aplicación en el teléfono móvil, para poder sacar nuestro dinero de un cajero, para comprar una silla de bebé para el coche, para ponernos una vacuna determinada, para que no nos entren en la cuenta de Instagram,…

El miedo es el elemento común que permite todas estas cosas en las que el resultado es siempre el mismo: cedemos nuestra libertad por un poco de aparente seguridad. Y esto va a más, porque hay un miedo principal que han conseguido inocular en la sociedad: el miedo al cambio climático, bajo cuya amenaza (real, creada o provocada) ya se están cambiando los cimientos y la estructura de nuestra sociedad. Porque solo con el control absoluto se podrán conseguir «ciudades y comunidades sostenibles».

¿Cómo lo harán?

-Creando y provocando situaciones de emergencia que supongan una amenaza para todo el planeta.
– Aprovechando las emergencias reales y presentándolas como consecuencia de las emergencias creadas y provocadas.
– Sirviéndose de los medios de información y comunicación para acrecentar la sensación de emergencia y para difundir un relato único de los hechos.
– Censurando y persiguiendo las informaciones que contradigan el relato oficial, tachándolas de bulos y desinformación, amparados por cómplices que se aprovecharán de su situación de autoridad y credibilidad para confundir a las personas.
– Desacreditando a los expertos que aporten criterios y argumentos profesionales o científicos y que puedan reducir la atmósfera del miedo entre la población.
– Estableciendo legislaciones y medidas que restrinjan las libertades de los individuos: libertad de movimiento, de reunión, de expresión, de propiedad, de privacidad, etc.
– Imponiendo multas, sanciones y mayor privación de libertades para disuadir a los infractores y opositores.
– Promoviendo la «colaboración ciudadana» para llegar a aquellos lugares donde las medidas impuestas no sean suficientes.
– Estableciendo un sistema de premios y castigos según el comportamiento esperado, que supongan la promoción o degradación social de los individuos.
– Promoviendo la concentración de la población en las ciudades, que son más fáciles de controlar que los pueblos.

Cuando dicen:

ALIANZAS PARA LOGRAR LOS OBJETIVOS

En realidad quieren decir:

GOBIERNO GLOBAL. NUEVO ORDEN MUNDIAL

¿POR QUÉ ES ESTO?

Llegamos al último objetivo de la Agenda 2030, que es en realidad el que sintetiza, explicita y desvela el verdadero proyecto que llevan desarrollando y tratando de implementar desde hace décadas: establecer un Nuevo Orden Mundial para controlar y disponer de nuestras vidas.

¿Cómo lo harán?

– A través de los medios de comunicación, que ellos controlan, que serán los que establezcan qué es la verdad, qué hay que creer y qué es la desinformación, la teoría de la conspiración y las fake news. Serán los profetas de las calamidades que se ciernen sobre la humanidad, inoculando el virus del miedo en la población. Censurarán y cancelarán a los que no se adhieran al plan, tachándolos de negacionistas, incívicos e insolidarios. Promoverán la implantación del pensamiento único, la persecución de los valores cristianos, imponiendo una nueva ideología dominante, normalizando comportamientos contrarios a la naturaleza y la dignidad humana en sus contenidos de entretenimiento, condicionando las conductas sociales, especialmente de los más jóvenes, y alineándolas a los objetivos de sus dueños para lograr el Nuevo Orden Mundial.

– A través de los gobiernos, que les sirven, que son los que promoverán leyes que transformen el orden social para implementar y consolidar los objetivos ocultos de la Agenda 2030, su ideología, sus restricciones, su nuevo establishment y sus estructuras de poder. Leyes que promuevan una guerra cultural contra los cimientos de nuestra civilización. Políticos que venderán la soberanía de las naciones, sus recursos y riquezas y traicionarán la confianza de sus ciudadanos a cambio de cinco minutos más de poder, unos pocos aplausos y una jubilación dorada en multinacionales y organismos internacionales.

– A través de las grandes empresas y multinacionales,que pondrán su imagen, su misión empresarial y su responsabilidad social al servicio de promocionar, blanquear y difundir este Nuevo Orden Mundial. Son empresas que dominan los sectores industriales, agroalimentarios, servicios profesionales, turismo, farmacéutico y sanitario, servicios financieros de banca y seguros, telecomunicaciones y energía. Establecerán políticas, tarifas y servicios que obliguen a sus clientes a tragar con los postulados mundialistas y asumir el relato oficial del miedo. Apoyarán las legislaciones de los gobiernos con el fin de llevarse un poco más del pastel.

– A través de científicos, profesores, médicos, investigadores, abogados, periodistas, policías, personas de la cultura y profesionalesde todo tipo, que traicionarán su deontología, su autoridad y su prestigio para convertirse en colaboradores necesarios, que desde su posición privilegiada influyan en el pensamiento, en el conocimiento científico, en la educación, en la manipulación de la información y en el comportamiento de las personas, a cambio de dinero y fama.

– A través de las empresas tecnológicas, que los poderosos han creado o comprado y que utilizan su creatividad, su innovacion y sus recursos en tecnología en perfeccionar el control, el seguimiento y el acoso a la privacidad e intimidad de las personas, mientras les entretienen con gadgets y juguetitos que les prometen una vida más facil y el fin de sus problemas. Mediante su uso obtienen nuestra información, estudian nuestros hábitos de vida, trabajo, entretenimiento, monitorizan nuestras relaciones sociales, trazan perfiles y venden toda esta información para desarrollar formas cada vez más efectivas de controlarnos y condicionar nuestra forma de pensar.

– A través de las organizaciones supranacionales, políticas, económicas y sociales, que les permiten someter a los países e imponerles una nueva legislación y una nueva moral, estableciendo a nivel mundial políticas y doctrinas iguales en todo el mundo, evitando los procesos electorales, eliminando las barreras nacionales y consiguiendo de facto un control efectivo sobre toda la población mundial. Son la ONU, la OMS, El Foro Económico Mundial, el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial, la UNESCO, UNICEF, son también tantas ONG que promueven y ejecutan los planes globalistas. Son los gérmenes del nuevo gobierno global que una vez conseguido el objetivo, decidirá sobre nuestra salud, nuestra educación, nuestros derechos, nuestros trabajos y en definitiva sobre nuestras vidas, sin oposición.

– A través de los líderes religiosos, que renunciarán a los principios, doctrinas y creencias que se comprometieron a defender y de los que son faros para miles de millones de personas en todo el mundo. Estos traidores a la Verdad difundirán en su lugar una amalgama de doctrinas sincretistas, nacidas de la ideología dominante y el pensamiento único, bajo la promesa de una sociedad en paz, armonía, igualdad, libertad y fraternidad, en comunión con la Madre Tierra, para la construcción de un paraíso en la Tierra. Junto al Gobierno Global del Nuevo Orden Mundal conformarán también una Religión Mundial que guiará las creencias y los comportamientos morales de la humanidad.

– A través de las sociedades secretas, donde los poderosos se reúnen y planifican todo, donde reciben la perversa inspiración para sus planes y venden sus almas por un poco de poder temporal. Donde dan rienda suelta a sus inmoralidades, sus abusos y sus crímenes impunemente. Donde han planeado desde hace siglos infiltrarse, corromper y destruir desde dentro las instituciones que forman los pilares y fundamentos del orden social cristiano en occidente.

– A través de una ciudadanía dormida e indolente, paralizada por el miedo a perder su engañoso estado de bienestar, sin espíritu crítico, sin cuestionarse ni rebelarse contra leyes e imposiciones injustas. Personas cuya mente está colonizada por el ocio, la televisión y las redes sociales, mientras les roban sus derechos, su libertad, su dinero, su historia, su soberanía, su cultura y su fe.

¿Quiénes son?

Hemos hablado ampliamente de cuál es su objetivo, cuál es su plan, cuáles son sus medios y ahora es el momento de explicar quiénes son los que mueven los hilos.

Hemos visto que son personas poderosas, que influyen en gobiernos e instituciones, que han creado y dirigen los organismos supranacionales, que controlan los medios de comunicación y las grandes empresas internacionales, que realizan pactos secretos y que están por encima de cualquier organismo político, legal, económico y social.

Son multimillonarios y se presentan en sociedad como filántropos y bienhechores, de los más vanidosos conocemos sus nombres y apellidos, de los más discretos podemos ver su mano invisible orquestando los distintos escenarios que se suceden en la historia y que terminan distorsionándose al público bajo acusaciones de teorías de la conspiración y posverdad.

Son los Amos del Mundo y sus decisiones afectan a miles de millones de personas en todo el planeta. Ahora quieren establecer el Nuevo Orden Mundial y están muy cerca de conseguirlo.

¿Crees que todo esto es cuento? Te doy un dato

Hay dos empresas que se reparten el control de Abertis, ACS, AENA, Amadeus, Banco Sabadell, Banco Santander, BBVA, Bankinter, Ferrovial, Grifols, IberdrolaRepsol, Telefónica, Apple, Google, Disney, Netflix, Amazon, Microsoft, Coca Cola, Samsung, Meta (Facebook, Instagram),Intel, Nvidia, Cemex, PepsicoTime Warner, Ferrari, Gilead, Bank of America, Wells Fargo, Citigroup, Goldman Sachs, Oracle, Sales Force, Johnson & Johnson, Ford, TeslaPfizer, Moderna, Bayer, McDonalds, Starbucks, Wal-Mart,Exxon, Visa, Mastercard, American Express, Paypal, Nike,Chevron, Uber, BoeingProcter & Gamble, Unilever, Mondelez, Fox News, CBS, Atresmedia (Antena 3, la Sexta, Onda Cero, etc.), Prisa (El País, los 40, Santillana, SER, etc.)Mediaset (Telecinco, Cuatro, etc.), entre muchísimas otras.

Imagino que siendo unas empresas tan importantes y con tanto poder conocerás sus nombres y quiénes son sus dirigentes. Si lo sabes, nada de lo que he contado te sorprenderá, si no lo sabes, pregúntate por qué y despierta.

By Saruman