No es España sino el sanchismo el que está en crisis con Argentina.

¿Llamar corrupta a la mujer de Sánchez es atacar la soberanía de España? Mentira. Sánchez se siente con derecho a llamar drogadicto a Milei, pero el presidente argentino no puede calificar de corrupta a quien está siendo investigada por la justicia por corrupción?

La frase de Milei referida a Pedro Sánchez es aprovechada por Moncloa para abrir un conflicto diplomático con Argentina: «Hay quien tiene una mujer corrupta y se toma 5 días para pensarlo». Sánchez consigue así distraer al pueblo para que no piense en la corrupción de su esposa.

A Sánchez y a sus huestes les ha venido muy bien este conflicto, que les sirve para que el pueblo no piense en la corrupción de Begoña y en los muchos escándalos que evidencian la inmensa corrupción del socialismo español.

¿Qué es más grave llamar drogadicto a Milei o llamar corrupta a la esposa de Sánchez? Sin duda lo primero, sobre todo porque el ataque es directo al presidente de una nación amiga.

Es mentira lo que dice el ministro español de Exteriores. Milei no ha atacado a España, como afirma. Sólo ha llamado corrupta a la mujer de Sánchez, que ha sido denunciada ante la Justicia por casos de corrupción.. Tampoco hubo ataque a la soberanía de España. Hace días, un ministro de Sánchez llamó drogadicto al presidente argentino y Argentina demostró mesura, sin llamar a su embajador ni abrir conflicto diplomático.

Pero el sanchismo es capaz de todo y su ansia de poder es peligrosa y temeraria. Han abierto una crisis con Argentina porque le conviene a Sánchez, sin que Milei haya ofendido a España o a su soberanía. Como es habitual en el sanchismo, la crisis nace jalonada de mentiras, exageraciones y trucos

Las víctimas de esta crisis, si no se frena y corrige con urgencia, serán muchas: España, Argentina, las empresas españolas radicadas allí y las relaciones con toda la comunidad iberoamericana.

Sánchez le pide a Milei que rectifique y pida disculpas, pero ¿quien ha rectificado o pedido disculpas en España cuando el ministro Oscar Puente llamó drogadicto a Milei?

Desproporción, teatro, mentiras y engaños protagonizados por gente irresponsable y enfermiza por su desmedida afición al poder.

Sánchez, en realidad, se siente feliz porque Milei le ha proporcionado el argumento que necesitaba para enardecer a la izquierda, movilizarla e impedir así la derrota que se esperaba en las elecciones europeas del 9 de junio.

Todo vale para el sanchismo con tal de conservar el poder.

La sobreactuación española es frívola, está cargada de irresponsabilidad y puede costar caro a los dos países, pero Sánchez, gracias a ese incidente, podrá exaltar y llenar de odio a sus huestes, que es su objetivo primordial.

By Saruman