El Comité del Pueblo Israelí (IPC), un organismo civil formado por destacados expertos en salud israelíes, ha publicado su informe de abril sobre los efectos secundarios de la vacuna de Pfizer, que indica daños en casi todos los sistemas del cuerpo humano. Si las conclusiones del IPC son auténticas, la vacuna de Pfizer está relacionada con más muertes en Israel que la de AstraZeneca en toda Europa. Los resultados son catastróficos en todos los niveles posibles. Este es un informe detallado que destaca los hallazgos más devastadores.
El veredicto del Comité Popular Israelí es que «nunca ha habido una vacuna que haya perjudicado a tanta gente». El informe es largo y detallado (lea el informe completo a continuación).
«Recibimos 288 informes de muertes en la proximidad de la vacunación (el 90% hasta 10 días después de la vacunación), el 64% de ellos eran hombres».
Sin embargo, el informe afirma que «según los datos proporcionados por el Ministerio de Sanidad, sólo 45 muertes en Israel estaban relacionadas con la vacuna.»
Si estas son las cifras genuinas, entonces Israel no ha informado sobre sus resultados experimentales de forma genuina.
Hemos oído hablar mucho de los raros efectos secundarios de la vacuna de AstraZeneca y de los más de 300 casos de coágulos de sangre encontrados en Europa.
Científicos alemanes han descubierto el proceso exacto de dos pasos por el que la vacuna COVID-19 de AstraZeneca provoca coágulos de sangre en los receptores. Describen una serie de acontecimientos que tienen que ocurrir en el cuerpo antes de que las vacunas creen estos grandes coágulos.
Si los hallazgos del IPC son auténticos, la vacuna de Pfizer está relacionada con más muertes en Israel que la de AstraZeneca en toda Europa.
Mientras tanto, los CDC y la FDA de EE.UU. han levantado su pausa recomendada en el uso de la vacuna contra el coronavirus de Johnson & Johnson con la condición de que ahora incluirá una etiqueta de seguridad advirtiendo que su vacuna viene con riesgos de coágulos de sangre.
«Según los datos de la Oficina Central de Estadística durante enero-febrero de 2021, en el momento álgido de la campaña de vacunación masiva israelí, se produjo un aumento del 22% de la mortalidad general en Israel en comparación con el año anterior.»
«De hecho, enero-febrero de 2021 han sido los meses más mortíferos de la última década, con las mayores tasas de mortalidad global en comparación con los meses correspondientes de los últimos 10 años».
El CIP constata que «entre el grupo de edad de 20 a 29 años el aumento de la mortalidad global ha sido más dramático. En este grupo de edad, se detecta un aumento del 32% en la mortalidad global en comparación con el año anterior.»
«El análisis estadístico de la información de la Oficina Central de Estadística, combinado con la información del Ministerio de Sanidad, lleva a la conclusión de que la tasa de mortalidad entre los vacunados se estima en aproximadamente 1: 5000 (1: 13000 en las edades de 20 a 49 años, 1: 6000 en las edades de 50 a 69 años, 1: 1600 en las edades de 70 años o más).»
«Según esta estimación, es posible calcular el número de muertes en Israel en proximidad de la vacuna, a día de hoy, en unas 1000-1100 personas.»
Si se trata de un verdadero análisis estadístico, las cifras comunicadas por las autoridades sanitarias de Israel son muy engañosas.
«Existe una alta correlación entre el número de personas vacunadas por día y el número de muertes por día, en un rango de hasta 10 días, en todos los grupos de edad».
«Edades de 20 a 49 años: un rango de 9 días desde la fecha de vacunación hasta la mortalidad, edades de 50 a 69 años: 5 días desde la fecha de vacunación hasta la mortalidad, edades de 70 años en adelante: 3 días desde la fecha de vacunación hasta la mortalidad».
El IPC también revela que «el riesgo de mortalidad tras la segunda vacuna es mayor que el riesgo de mortalidad tras la primera».
No se trata sólo del riesgo de muerte, según los informes del IPC, «a la fecha de publicación del informe, se han acumulado 2066 informes de efectos secundarios en el Comité de Investigación Civil y los datos siguen llegando.
Estos informes indican daños en casi todos los sistemas del cuerpo humano. Nuestro análisis encontró una tasa relativamente alta de lesiones relacionadas con el corazón.
El 26% de todos los eventos cardíacos se produjeron en personas jóvenes de hasta 40 años, siendo el diagnóstico más común en estos casos la miositis o la pericarditis.
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También se ha observado una alta tasa de hemorragias vaginales masivas, daños neurológicos y daños en el sistema óseo y cutáneo.
Cabe señalar que un número importante de informes sobre efectos secundarios están relacionados, directa o indirectamente, con la hipercoagulabilidad (infarto), el infarto de miocardio, los accidentes cerebrovasculares, los abortos espontáneos, la alteración del flujo sanguíneo a las extremidades y la embolia pulmonar.»
Lea a el resumen del informe del Comité Popular Israelí en inglés y en hebreo aquí.