“La carne cultivada en biorreactores israelíes está llegando a las cenas americanas”.
Nos están atiborrando de carne 100% sintética con sus campañas diarias del “futuro de la alimentación”. Como si imágenes como estas hicieran que nos enamoráramos de su papilla de fábrica, sin importar cuánto dinero tiren a los medios de comunicación y a las empresas de relaciones públicas.