TEl Instituto Aspen está financiado en gran parte por fundaciones habituales, como la Carnegie Corporation , el Rockefeller Brothers Fund , la Fundación Gates , la Fundación Lumina y la Fundación Ford.
En “El Gran Tablero de Ajedrez: La Primacía Estadounidense y sus Imperativos Geoestratégicos”, Zbigniew Brzezinski planteó la visión de crear una “zona global de violencia creciente”, que llevaría a la división de Oriente Medio en un mosaico de facciones rivales y debilitaría la autoridad de las repúblicas y reinos existentes, que podrían ser hábilmente manipulados para inhibir la integración de los estados de Asia Central. [Véase: “Zbigniew Brzezinski: Discípulo de Aldus Huxley-Betrand Russell y su implementación del Nuevo Orden Mundial” ]
Al mismo tiempo, el sionista neoconservador Bernard Lewis argumentó abiertamente que Occidente debería fomentar levantamientos nacionalistas entre minorías, como los maronitas libaneses, los kurdos, los armenios, los drusos, los baluchis, los turcos azerbaiyanos, los alauitas sirios, los coptos de Etiopía, las sectas místicas sudanesas, las tribus árabes, los chiítas contra los sunitas, etc. El resultado sería, en la terminología de Brzezinski, un Arco de Crisis.
Inventando a los islamistas
Como parte de este proceso, curiosamente, en 1955, la Hermandad Musulmanatrasladó su sede de El Cairo a Londres y Ginebra, lo que hizo más evidente su relación con el Sindicato del Crimen TPTB. En Ginebra, su líder, Said Ramadhan, fundó el Instituto de Estudios Islámicos. En El Cairo, Ramadhan había sido acusado de conspirar para asesinar a Nasser yde mantener vínculos con la inteligencia israelí. En 1973, Ramadhan fundó el Consejo Islámico de Europa, consede en Londres.
Robert Dreyfuss, en “Rehén de Jomeini”, aporta más detalles:
La verdadera historia de la Hermandad Musulmana es más fantástica de lo que la mera imaginación de los autores de novelas de espionaje podría crear. Funciona como una conspiración; sus miembros intercambian saludos en clave y contraseñas secretas; aunque no existe una lista formal de miembros, están organizados en células jerárquicas o “logias”, como las sociedades y órdenes masónicas europeas. La Hermandad Musulmana no respeta fronteras nacionales; se extiende por todo el mundo islámico. Algunos de sus miembros son funcionarios gubernamentales, diplomáticos y militares; otros son gánsteres callejeros y fanáticos. Mientras que los líderes de la Hermandad Musulmana se sienten cómodos en las lujosas salas de juntas de las principales instituciones financieras, en los niveles más bajos la Hermandad Musulmana es un ejército paramilitar de matones y asesinos.
En su nivel más alto, la Hermandad Musulmana no es musulmana. Tampoco es cristiana, judía ni pertenece a ninguna religión. En el consejo más íntimo hay hombres que cambian de religión con la misma facilidad con que otros hombres se cambian de camisa.
El punto fuerte del Instituto Aspen en la década de 1970 fue promover la austeridad bajo la apariencia de ambientalismo en los países en desarrollo. Solo pretendían aplicarla de palabra en Occidente. Con el mismo pretexto de preocupación ambiental y espiritual y la filosofía de los “límites al crecimiento”, atacaron al Sha de Irán por sus planes de desarrollo para el país, incluyendo una propuesta de expansión de la industria nuclear de su país. Aunque el Sha fue instalado por el aparato anglo-estadounidense-sionista, se había convertido en un nacionalista con sentimientos sobre la antigua grandeza de Persia. Los fundadores fueron islamistas, formados para ser retrógrados y estar en contra de la modernización. Esta era una versión sintética del Islam, con un crecimiento cero.
La falsa versión dialéctica actual para frenar el progreso de Irán es el Movimiento Verde. Este también recibe financiación y apoyo de fundaciones occidentales, centros de estudios, Soros y varios sospechosos habituales extranjeros y mal intencionados.
Peter Goodgame, en “Los globalistas y los islamistas”, escribió: “Con el aumento de los precios de la energía, el desarrollo del Tercer Mundo se vio frenado, pero el Oriente Medio árabe se enriqueció enormemente. Fue entonces cuando los globalistas recurrieron a sus aliados, los islamistas, para remediar la situación. El islam se utilizaría para atacar la industrialización y la modernización con la mentira de que el progreso humano era antiislámico y una conspiración occidental contra los siervos de Alá”.
En 1975, como lo describió Robert Dreyfuss, se trazaron planes para revertir el programa de industrialización del Sha y convertir a Irán en un régimen modelo de la Edad Oscura. La conspiración del Instituto Aspen se centró en un solo tema: la modernización y la industria socavan los valores espirituales e inmateriales de la antigua sociedad iraní, y estos valores deben preservarse por encima de todo.
Mary Catherine Bateson, hija del infame capo del control mental y la propaganda negra, Gregory Bateson, impartió clases en el Damavand College de Teherán, donde participó decisivamente en esta estrategia, sembrando las semillas de la rebelión antimaterialista entre la juventud iraní. [Véase: «Gregory Bateson: El maestro de la propaganda negra de doble vínculo» ]
Se utilizaron recursos de inteligencia occidentales para impulsar al profesor iraní Ali Shariati, francmasón, y a muchos de los principales educadores de las universidades iraníes. Estos se incorporaron al círculo de la oposición al Sha. Ali Shariati se ganó un culto entre la juventud iraní.
La Hermandad Musulmana también intervino para perseguir el retraso de la industria iraní.Con sede en Ginebra, este agente, llamado Islam y Occidente, impulsó un mayor retraso social y económico: «Tenemos que volver a una concepción más espiritual de la vida».
Jomeini residía en la ciudad religiosa de Qom, donde, según Radio Free Iran, según informó el Dr. Coleman, exagente de la inteligencia británica [es imprescindible leer el libro del Dr. Coleman,The Tavistock Institute of Human Relations ], recibía un estipendio mensual de los británicos y mantenía contacto constante con sus superiores, los británicos. Jomeini se vio obligado a exiliarse en Francia, donde misteriosamente vivía en un entorno lujoso. Según Coleman: «Una vez instalado en el Château Neauphle, Jomeini comenzó a recibir un flujo constante de visitantes, muchos de ellos de la BBC, la CIA y la inteligencia británica».
La BBC se convirtió entonces en el principal promotor del Ayatolá. El Dr. Coleman escribe:
Fue la BBC, que preparó y distribuyó a los mulás iraníes todas las cintas de casete con los discursos de Jomeini, la que enfureció a los campesinos. Luego, la BBC comenzó a transmitir relatos de torturas perpetradas por la SAVAK del Sha a todo el mundo. En septiembre y octubre de 1978, la BBC comenzó a transmitir los delirios revolucionarios de Jomeini directamente a Irán en farsi.
Pronto, un gran segmento de la población iraní, en su mayoría jóvenes estudiantes, se opuso al Sha y se convenció de que el retorno al “islam chiita puro”, bajo el liderazgo del ayatolá Jomeini, era la única manera de salvar a su país. La administración Carter, manipulada por Zbigniew Brzezinski, colaboró entonces con los británicos para derrocar al Sha e instalar a Jomeini.
Gran parte del grupo asesor y la camarilla gobernante en torno a Jomeini se formaron en nidos de sociología y antropología afiliados a Tavistock, como Bani-Sadr en Francia (donde Pol Pot se dispuso a destruir Camboya), en santuarios dentro de Irán para controladores de cultos de antropología radical, o en instituciones con sede en Estados Unidos que promovían una rebelión “acuariana” contra la sociedad industrial, como el complejo Stanford-Berkeley en California. [Véase: “El método Tavistock de lavado de cerebro y psiquiatría social” ].