El primer ministro británico Starmer ha invitado al presidente sirio Ahmed al-Sharaa a visitar el Reino Unido para mantener conversaciones.
Anteriormente conocido como Abu Mohammed al-Jolani, al-Sharaa solía ser el líder de los grupos terroristas Al-Qaeda e ISIS.
Fue su coalición terrorista la que, con la ayuda de Estados Unidos, el Reino Unido e Israel, derrocó al presidente sirio Bashar al-Assad. También es responsable de la masacre de miles de cristianos en Siria.
Skwawkbox informa: Desde que asumió el poder, figuras del establishment y de los medios británicos han afirmado que los cargos de Al-Jolani en los grupos terroristas ISIS y Al-Qaeda son ahora “antiguos” y que es un exterrorista rehabilitado. Sin embargo, las fuerzas de Jolani están compuestas principalmente por combatientes actuales de ISIS que han estadodecapitandoy fusilando a un gran número de minorías drusas, alauitas y cristianas de Siria desde que Al-Jolani tomó el poder, grupos que consideran “apóstatas”, y recientemente emitieron unvideo advirtiendo que venían a beber la sangre de drusos y alauitas . Estas atrocidades han sidoencubiertas por los medios de comunicación tradicionales del Reino Unido .
El grupo ‘HTS’ de Al-Jolani sigue, al momento de escribir este artículo, en la lista de grupos terroristas proscritos del gobierno del Reino Unido:

La invitación de Starmer expone la hipocresía fundamental y cínica de su régimen. Él y sus agentes libran una guerra legal contra periodistas y otras personas que denuncian y se oponen al genocidio israelí en Gaza, abusando de la Ley Antiterrorista en su contra y procesándolos —muchos de ellos judíos— por supuestamente apoyar a Hamás, lo cual, según ellos, constituye un delito por estar en la lista de proscritos.
Sin embargo, está invitando y ciertamente otorgando inmunidad al líder de un grupo que está torturando y decapitando a grupos minoritarios que no le gustan, todo mientras dice que quiere relaciones con un régimen israelí genocida que ha bombardeado sus instalaciones y tropas y ha invadido una gran parte de Siria; sin duda la razón por la que Starmer está interesado en reunirse y rehabilitar al subgrupo al-Qaeda.
